Es el AMOR de DIOS el que tiene que llevarnos hacia cada persona con las que conversemos de tal modo que tenemos que pensar en el bienestar de él (ella) y no hay nada mejor que alcancen la vida que Jesús nos ha prometido a todos los que creen en ÉL.
El deseo ferviente del Apóstol Pablo era de alcanzar el mayor número de personas para Cristo y la Gran Comisión de Mateo 28:19 es de ganar almas para Cristo y su misma palabra nos dice que la sabiduría está en el temor a Jehová o sea en que le obedezcamos. Si le somos obedientes, seremos sabios en ÉL y el que haga volver del pecado a una alma y lo salva de la muerte, hace que muchos pecados sean perdonados.
El desafío para cada uno de nosotros es que tenemos que ser forjadores de vida a todas esas almas que vagan por el mundo, tenemos que ser edificadores de vidas destruidas que andan sin rumbo, porque servimos a un DIOS que nos ha dado vida y vida en abundancia. Si tenemos esa vida en abundancia quiere decir que hay de sobra para los demás.
El momento es ya, hermanos, seamos obedientes al llamado y que nuestros frutos sean para levantar al caído, para que las personas que agonizan por las circunstancias de este mundo sepan que existe una solución: “CRISTO JESÚS NUNCA HA DEJADO DE AMARTE”
— Hno. René Mercado O. Maestro EBD
Renovación Año 5 – Edición 15