Colosenses 3:15
Amigo creyente, hay muchas personas hoy que se destacan por su defensa de la doctrina bíblica y por su fe en la Palabra de Dios. Esto es sumamente importante. Pero a veces, estas actitudes no van acompañadas por un conocimiento completo de la Palabra de Dios.
Aquí se menciona a «la palabra de Cristo». Recordemos que el Señor Jesucristo dijo en Juan 15:3, vosotros estáis limpios por la Palabra que os he hablado. Figurativamente hablando, el mejor baño, la mejor operación de limpieza a la que usted puede someterse es una inmersión en el estudio de la Palabra de Dios.
Y que esa Palabra habite, quiere decir que se sienta como en su casa, que lleve las riendas de la casa. Tendríamos que estar familiarizados con la Palabra de Dios. La Biblia no debería ser para usted un libro extraño, como lo es hoy para tanta gente.
El versículo 15 dice: y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones y después el versículo 16 añade, La palabra de Cristo habite en abundancia en vosotros, es decir, que se sienta como en su propia casa. Debemos conocerle a Él. Debemos estar bien familiarizados con la Palabra de Cristo, y debemos estudiarla y conocer lo que Cristo nos está diciendo a cada uno de nosotros en el día de hoy. Porque allí es donde Él nos habla a nosotros, estimado oyente, en Su Palabra.
Y, luego, nos dijo el apóstol, enseñaos y exhortaos unos a otros. ¿Con qué? Con salmos, himnos y cánticos espirituales.
Y se añade: cantando con gracia en vuestros corazones al Señor. El caso es que debemos permitir que la Palabra de Dios ejerza es maravillosa influencia en nuestras vidas que Pablo estaba describiendo aquí. Y luego él dijo en el versículo 17:
«Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él.»
¿Quiere usted una norma para la conducta cristiana? ¿Necesita usted una pauta para actuar hoy? ¿Quiere usted un principio, antes que una cantidad de pequeñas reglas? Pablo nos dejó aquí ese principio: él no nos dijo que debíamos o no debíamos hacer. Simplemente dijo: hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él. Estimado creyente, cualquier cosa que hagamos, en nuestro lugar de trabajo, en nuestro hogar y en todas nuestras relaciones con los demás, podemos decir: «estoy haciendo esto en el nombre del Señor Jesús». Si usted puede decir esto, si usted lo está haciendo en su nombre, entonces siga adelante y hágalo. Esta es una buena norma y un criterio para establecer en nuestras vidas.
A continuación, Pablo trató el tema de la santidad en el hogar. Usted observará que él estaba cubriendo los mismos asuntos que desarrolló en la epístola a los Efesios. Allí él les dijo a los creyentes que fueran llenos del Espíritu Santo, y después les dio las mismas instrucciones. Aquí en Colosenses escribió: la palabra de Cristo more en abundancia en vosotros… en toda sabiduría y después procedió a dar instrucciones para la vida cristiana.
¿Qué significa ser lleno del Espíritu Santo? Bueno, también significa que usted tendrá que estar lleno de la Palabra de Cristo. La Palabra de Dios ha sido inspirada por el Espíritu de Dios. Si la Palabra de Dios mora en usted en abundancia, con toda su riqueza, entonces usted estará lleno del Espíritu de Dios, es decir, controlado por el Espíritu. No creemos que usted pueda ser lleno del Espíritu Santo o que pueda servir a Cristo hasta que esté lleno del conocimiento de su Palabra. Recordemos este consejo: que la palabra de Cristo more en abundancia en vosotros.
Muchos cristianos hablan de su dedicación al Señor y de sus deseos de servirle, pero son perezosos. Con toda sinceridad, si usted es perezoso en su trabajo, usted no está dedicado, consagrado a Jesucristo.